Vistas de página en total

domingo, 10 de febrero de 2008

PLENITUD

Nos hacen creer que que las opulentas sociedades occidentales lo tenemos todo, lo sabemos todo, lo hemos visto todo. Sin embargo miramos hacia nuestro interior y vemos que estamos completamente vacios por dentro, que no tenemos nada verdadero salvo nuestra casi siempre maltrecha y endeudada tarjeta de crédito, que no sabemos más que aquello que nos quiere vender la televisión, que no hemos visto nada real más allá del edulcorado disneyworld.
Ya en el parvulario nos hiceron creer que habíamos ganado un concurso de dibujo para vendernos la enciclopedia Espasa y luego Hollywood que éramos tipos completamente excepcionales.
Al confrontar esto con la desnuda realidad toda una generación se convirtió a la religión del descreimiento.No confiamos en los altavoces que retumban en los supermercados para vendernos champú porque la contaminación y el stress nos ha dejado sin pelo, tampoco en lo que nos susurran las chicas pues Errol Flynn ha muerto alcoholizado y nuestros sueños se han quebrado hace mucho.
Insoportable panorama y dos alternativas. El pueril escape del indulgente autoengaño para unos, triunfadores de sus fantasías. Calculado, consciente, cruel y autodegradante vagar para otros, pero marineros todos en un oceano que no tiene olas ni habitan las sirenas, en un viaje sin rumbo, consumiendo nuestros años en una continua huida hacia adelante buscando paraisos perdidos con una sola certeza, nuestro inevitable final.

No hay comentarios: